Mi versión de la clásica tarta "Selva negra" es el resultado de una búsqueda entre miles de recetas existentes.
Una versión que está en su punto justo de dulzura, destacando el contraste entre el chocolate y las cerezas y equilibrada por la nata batida.
Riquísima!!!
TARTA "SELVA NEGRA"
Bizcocho de chocolate
4 huevos L
Pizca sal
40 g de azúcar (A)
80 g de azúcar (B)
1/4 cdita de vainilla
80 g de harina
20 g de maicena
20 g de cacao puro sin azúcar
2 cditas de levadura química
Mezclar la harina con la maicena, el cacao y la levadura química. Tamizar y reservar.
En un recipiente, seco y limpio batir las claras con una batidora eléctrica a velocidad media con una pizca de sal y cuando espumen, empezar a añadir el azúcar B (80g) gradualmente. Batir hasta el punto de nieve y reservar.
Aparte, en otro bol, batir las yemas con el azúcar A (40g) y la vainilla unos 3 minutos. Añadir las claras poco a poco y remover suavemente con una espátula de silicona. Agregar la harina en forma de lluvia y remover con delicadeza.
Repartir la mezcla entre dos moldes de 18cm previamente engrasados y forrados con papel vegetal. Hornear a 175ºC unos 20 minutos. Sacar del horno, desmoldar sobre una rejilla y dejar enfriar completamente.
Cerezas para el relleno
300 g de cerezas
20 ml de Kirsch
50 g de azúcar moreno
Corteza de limón
Rama de canela
Deshuesar las cerezas, mezclarlas con el resto de ingredientes y dejar macerar 2 horas. Una vez pasado ese tiempo, ponerlas en un cazo a fuego medio, hervir unos minutos, quitar del fuego y dejar enfriar a temperatura ambiente. Una vez enfriadas las cerezas, colarlas y reservar por una parte las cerezas y por otra el zumo para hacer el jarabe.
Jarabe
75 ml de agua
75 g de azúcar
El zumo de las cerezas
En un cazo, poner el agua con el azúcar a fuego medio y llevar a ebullición. Quitar del fuego y añadir el zumo de las cerezas.
Crema de nata
600 g de nata líquida 35% m.g.
120 g de azúcar glass
1 cdita de estabilizante de nata
En un recipiente, limpio y seco batir la nata junto con el azúcar glass y el estabilizante hasta que esté firme. Reservar en la nevera hasta su uso.
Montaje de la tarta
Dividir la crema en dos partes iguales. Una para el relleno y la otra para la decoración.
Cortar cada bizcocho en dos capas para obtener cuatro capas en total.
Poner la primera capa, humedecer con jarabe, poner 1/3 de la crema para el relleno y repartir 1/3 de las cerezas maceradas (enteras o picadas a gusto de cada uno). Poner encima la segunda capa de bizcocho y repetir los pasos anteriores hasta completar la tarta. Cubrir con la última capa y dejar refrigerar 30 minutos en la nevera.
Cubrir los laterales y la superficie con la crema reservada para la decoración y alisar muy bien.
Decorar con cerezas frescas y virutas de chocolate.
Supongo que para todos la regla número uno en pastelería, como en todo, es que el producto sea tan rico, delicioso y apetecible que te deje huella.
¿De acuerdo? Pero también comemos con los ojos. Si el aspecto es horrendo y descuidado perdemos casi todas las oportunidades de que alguien se acerque a probar nuestro producto... Así que el diseño es importantísimo. Cuanto menos, que nos indique qué podemos esperar de su sabor. He aquí el ejemplo. Nada mas ver estos cupcakes, ya nos desvelan su principal ingrediente... El plátano!
CUPCAKES DE PLÁTANO (para 8 unidades)
65 g de mantequilla sin sal
70 g de azúcar
1/4 cdita de vainilla
1 huevo L
1 plátano hermoso
110 g de harina
1/2 cdita de levadura química
1/4 cdita de bicarbonato
Pizca sal
Forrar un molde de cupcakes con cápsulas de papel.
Mezclar la harina con la levadura química, el bicarbonato y la sal. Tamizar todo junto y reservar.
Hacer puré del plátano con la ayuda de un tenedor.
En un recipiente, batir la mantequilla con el azúcar y la vainilla hasta que la mezcla quede cremosa. Añadir el huevo y batir hasta que se integre. Agregar la mezcla de harina en 2 veces y remover con la ayuda de una espátula de silicona. Añadir el puré de plátano, mezclar y repartir la masa entre las cápsulas sin sobrepasar los 2/3.
Hornear a 180ºC unos 20 minutos hasta que estén ligeramente dorados y un palillo insertado en el centro salga limpio.
Sacar del horno, desmoldar sobre una rejilla y dejar enfriar completamente.
La crema de untar Lotus Speculoos se puede sustituir perfectamente por dulce de leche.
En un recipiente, batir la mantequilla a temperatura ambiente con varillas eléctricas a velocidad con el azúcar glass. Añadir el queso Philadelphia. Mezclar rápido. Agregar la crema de galletas Lotus y remover sin sobrebatir la mezcla.
Llenar con crema una manga pastelera con una boqilla 2D de Wilton y decorar los cupcakes. Adornar con mini plátanos hechos de fondant.
Una tarta, que fue un experimento y que obtuvo un resultado más que satisfactorio.
Hace tiempo, tenía la curiosidad de hacer una tarta decorada con fondant, pero en vez de llevar el típico bizcocho Madeira, quise hacerla con bizcocho Genovés, que es suave, tierno, esponjoso... Mmm, me encanta.
Bueno, creo que para tartas pequeñas (p.ej. de 15 cm de diámetro) es genial. Claro, tenía que ser alta, porque aparte de que me gustan así, tienen una buena base que permite sujetar mejor el peso del fondant.
Por tanto, no me arriesgaría a hacer tartas de más de 18 cm de diámetro con este tipo de bizcocho, ya que la cantidad de fondant que tienen que soportar es grande. Para este tamaño, es mejor utilizar un bizcocho más consistente como el Madeira Sponge Cake.
TARTA DECORADA "BEBÉ" / BABY CAKE
Bizcocho Genovés de naranja:
4 huevos L
120 g de azúcar
80 g de harina
1/2 cdita levadura química
La ralladura de 1/2 naranja
Separar las claras de los huevos en un recipiente limpio y seco. Empezar a batir con una batidora eléctrica, y cuando espumen, añadir el azúcar gradualmente. Seguir batiendo unos 5 minutos hasta el punto de nieve. Sin dejar de batir, a velocidad mínima, añadir las yemas de una en una y batir 2 minutos más. Agregar la harina con la levadura química (previamente mezcladas y tamizadas) en 3-4 veces y remover suavemente con movimientos envolventes con una espátula de silicona. Al final añadir la ralladura de naranja y revolver hasta integrarla. Dividir la mezcla en dos moldes de 15 cm, previamente engrasados y cubiertos con papel vegetal. Hornear a 180ºC unos 10 minutos y luego, bajar la temperatura del horno a 160ºC horneando unos 30 - 35 minutos más, o hasta que esté ligeramente dorado y un palillo insertado en el centro salga limpio. Sacar del horno. Dejar enfriar unos 5 minutos, luego, desmoldar sobre una rejilla y dejar enfriar completamente.
Crema de chocolate blanco y naranja:
150 ml de nata líquida 35% m.g.
125 g de queso Mascarpone
150 g de chocolate blanco
La ralladura de 1/2 naranja
colorante naranja liposoluble (opcional)
En un cazo, calentar la nata a fuego medio sin que llegue a hervir. Verter sobre el chocolate blanco troceado y remover hasta que se disuelva. Añadir el colorante si se desea y mezclar bien. Dejar enfriar completamente a temperatura ambiente y luego unas horas en la nevera. Una vez fría la mezcla de chocolate, batir con una batidora eléctrica para airearla. Aparte, suavizar el queso Mascarpone con una espátula de silicona y añadir poco a poco a la crema anterior. Agregar la ralladura de naranja y remover con suavidad hasta conseguir una mezcla homogénea.
Dividir cada bizcocho en dos capas para conseguir cuatro capas. Humedecer estas con jarabe de vainilla (75 ml de agua, 50 g de azúcar, 1/4 cdita de vainilla) y rellenarlas con crema de chocolate blanco y naranja. Cubrir la superficie y los laterales con crema básica de mantequilla, y refrigerar durante la noche antes de cubrirla con fondant.
